domingo, 27 de diciembre de 2015

Crónica San Silvestre Santa Coloma

Acabo el año con una carrera en la que ya participé el año pasado: la 5ª edición de la San Silvestre de Santa Coloma de Gramanet, con dos distancias: 5 K y 10 K.


No tenia muy claro apuntarme a esta carrera, pero al final me decidí al no poder participar en las 24 horas de corredors.cat, me habría gustado poder participar en uno de los dos equipos que montaron los Red Runners. Por desgracia los compromisos personales no me permitieron ni tan siquiera acercarme a animar...

Tras los típicos excesos de los días previos, me levanto con animo de intentar hacer con dignidad esta carrera. Recordaba el perfil exigente de los primeros cuatro o cinco kilómetros, con exigentes y continuas subidas y bajadas, que requieren controlar el ritmo, si luego no quieres sufrir mas de lo necesario.

Según la organización el horario de recogida de los dorsales era el mismo día de la carrera, de 8 a 9. Como de costumbre me levanto temprano y sigo mi ritual pre-carrera. Poco antes de las ocho y media salgo de casa, como vivo a escasos dos kilómetros de las pistas de atletismo donde esta la salida, decido ir corriendo, a un trote muy suave, a modo de pre calentamiento.

Calentando antes de la carrera.
(Foto CarlesCat)
Recojo el dorsal sin complicaciones y me encuentro con un par de compañeros Red Runners: Carles, que no participa y viene a animar y sacar fotos y Fran, que sale de una lesión. La hora de la salida, prevista a las 10, se retrasa 30 minutos para dar tiempo a entregar todos los dorsales, ya que la gente esta llegando algo tarde...
Decidimos ir a tomar un café para hacer tiempo y vamos charlando de carreras pasadas, de carreras futuras y de lesiones. Pronto es la hora de la salida.

Tras dejar la ropa en los vestuarios, damos unas vueltas de calentamiento a las pistas de atletismo. Poco a poco se ha ido llenando de corredores y corredoras.

Hacemos la típica foto pre carrera y nos dirigimos a la linea de salida.

Foto pre carrera
(Foto Facebook Fran)
Preparados para la salida
(Foto CarlesCat)
Primeros metros tras la salida
(Foto CarlesCat)
Tras la salida intento no ir demasiado rápido, mis compañeros Red Runners se me escapan en los primeros metros. Tras rodear el parque de can Zam, giramos hacia el barrio del Singuerlín. Aquí es la parte mas exigente del recorrido, con unos trescientos metros de subida, tras un pequeño descanso viene otra subida de apenas 60 - 70 metros, pero mucho mas fuerte, donde algún corredor tiene incluso que acabar de subirla andando.

A partir de aquí el perfil es mucho mas favorable, hasta que las dos carreras de 5 y 10 km se separan. Los que hacemos la larga tenemos otros 600 metros de constante subida. Una vez giramos para encarar la Rambla de Sant Sebastià el perfil ya es totalmente favorable, con algún pequeño repechón que se puede superar sin complicaciones, solo con la inercia de la carrera.

Llego al kilómetro 5 con un parcial de 28:06. No está nada mal, teniendo en cuenta el perfil de la carrera hasta ese momento. Decido intentar mantener un ritmo que me permita acabar sobre los 56 minutos, es decir, una media de 5:30 min/km.

Poco a poco llegamos a la parte mas monótona de la carrera, totalmente llana, sobre el kilómetro 6,5 entramos en el vial del río Besós. Este es mi lugar habitual de entrenos. A partir de ahora la única dificultad será el viento en contra.

Voy adelantando a otros corredores, algunos que participan en la carrera y otros que simplemente están entrenando. Nos cruzamos con infinidad de ciclistas, que van por el carril bici que hay habilitado para ellos, y también nos cruzamos con mucha gente que simplemente está disfrutando de la mañana del domingo.

Llegamos al final del vial de río y subimos otra vez al lateral del parque de can Zam, desde donde solo nos quedan escasos cuatrocientos metros hasta la meta.

Entramos en las pistas de atletismo y cruzo la meta con un crono final (no oficial) de 55 minutos y 49 segundos.

Busco a los compañeros, que ya hace bastantes minutos que han cruzado la meta y ya están dando buena cuenta del bocadillo con que nos obsequia la organización.

Fran, yo y José Manuel.
(Foto Facebook Fran)
Tras comentar la carrera y apuntar en nuestras agendas las carreras que nos recomendamos, nos despedimos.

Está carrera el año pasado tuvo algunos fallos graves de organización, que este año ha mejorado. La señalización para separar las dos carreras de 5 K y 10 K este año ha mejorado bastante, aunque me han comentado que ha habido algún corredor que se ha despistado. Se podría haber dado una vuelta a la pista pista de atletismo antes de cruzar el arco de meta, en lugar de cruzar la meta tras apenas entrar en las instalaciones. Que para entrar en las instalaciones tuviéramos que cruzar el parking, cruzándonos con los coches de los corredores mas rápidos, que ya se iban hacia sus casas, no lo veo demasiado bien. 

Probablemente repita el año que viene...

Busco a mi mujer y a la peque, que finalmente han venido a buscarme, y, tras hacer unas carreras por la pista con mi hija, nos dirigimos caminando hacia casa.

Próxima carrera (ahora si): Mitja Marató de Ganollers.

Mas fotos aquí (fuente CarlesCat)

Alguna foto mas (propias, de CarlesCat y de Fran)






















domingo, 13 de diciembre de 2015

Crónica 18 Mitja Marató Ciutat de Mataró

Tras las buenas sensaciones que me quedaron después de la Cursa de Sant Martí, tocaba ahora enfrentarme a un nuevo reto doblando el kilometraje:


Tenía previsto hacer el mismo plan de entreno que tan buenos resultados me dio en mis anteriores carreras de esta distancia, pero, a pesar de planificar cuidadosamente los entrenos semanales, no pude cumplir ni una sola semana con la agenda prevista.

A pesar de los problemas que tuve para cuadrar la agenda de entreno con la vida familiar, conseguí acumular unos 65 kilómetros tras la Cursa de Sant Martí, acabando el mes de noviembre con 115 kilómetros en las piernas, con un par de tiradas largas de 15 y otra de 17 km. Todas ellas con ritmos medios por debajo de los 6 min/km ¡No esta nada mal!

Llega el fin de semana, tenia previsto acercarme el sábado por la tarde a Mataró para recoger el dorsal, pero compromisos familiares me lo impiden, por lo que activo el plan B: recoger el dorsal el domingo, antes de la carrera.

La organización había previsto solo el sábado por la tarde (de 16 a 20 h.) y un par de horas el domingo (de 7 a 9:30) antes de la carrera. Teniendo en cuenta que eramos unos 4.000 corredores lo veía algo justo.

Mi plan era ir en coche desde Barcelona y aparcar en el aparcamiento que ofrecía la organización en el centro comercial Mataró Park y usar el servicio de autobuses-lanzadera para ir hasta la salida.

Previendo posibles retrasos, salgo con tiempo de casa, y decido dar una vuelta por los alrededores de la salida para ver si tengo suerte y consigo aparcar. Dicho y hecho. Sobre las 8:15 ya había aparcado a un 500 metros de la salida, y en poco mas de diez minutos ya había recogido el dorsal con la camiseta de regalo y estaba de vuelta en el coche. 

Foto de los Red Runners.
Sobre las nueve me dirigí al punto de encuentro de los Red Runners que corríamos en esta carrera. Paso por delante  de la carpa de entrega de los dorsales y aquello era un caos. Había decenas de corredores apiñados frente a la lista de dorsales y esperando a recibir su dorsal. Hubo tal desorganización que la salida se retraso cinco minutos para dar tiempo a que todo el mundo pudiera ocupar su sitio en los cajones de salida. Desde luego este punto tienen que mirar de mejorarlo de cara a futuras ediciones.

Camino de la salida.
(Foto Facebook Red Runners)
En el punto de encuentro nos está esperando el compañero Toni, que en esta ocasión no corre y viene a hacer de fotógrafo. Tras las fotos de rigor, y tras comentar nuestros objetivos para esta carrera y los planes que tenemos para futuras carreras, nos dirigimos a ocupar nuestro sitio el los cajones de salida. A destacar la compañera Tere (y sus liebres Albert y Monica), que corría su primera media maratón.

Esperando la salida.
(Foto Facebook Red Runners)
Tras la salida, nos dirigimos hacia la carretera de Argentona, en un tramo de ida y vuelta, con algunos toboganes que podían romper el ritmo, bastante solitario, sin apenas presencia de público, donde en algunos tramos parecía que faltaba carretera para absorber a todos los corredores para que pudiéramos correr a gusto.

Pronto llegamos al kilómetro 5, donde estaba el primer avituallamiento (agua) con un parcial de 29:43. 

Durante los siguientes cuatro kilómetros atravesamos Mataró, dirección al Paseo de Callao y la Avda. del Maresme (N-II)

Cuando entramos en el Paseo Callao, nos esperan unos 12 kilómetros (casi) totalmente llanos, con la única dificultad del viento, que hoy no ha hecho acto de presencia.

Recibiendo ánimos...
(Foto Facebook Red Runners)
El el kilómetro 10, con un parcial de 58:24 empiezo a notar el cansancio y se me hace muy difícil enfrentarme a los siguientes 11 kilómetros. Justo en ese momento me encuentro a un grupo de Red Runners que no participan en la carrera, pero se han desplazado ha animar a los corredores. Me dieron una gran inyección de moral y energía para hacer la segunda parte de la carrera. ¡GRACIAS VANESSA, GUILLEM  Y AL RESTO DE COMPAÑEROS POR ESOS GRITOS DE ANIMO!

Con el subidón de energía tras los ánimos recibidos encaro la segunda parte de la carrera lleno de optimismo. 

Aprovecho para comer la barrita energética que llevaba, y entro en la N-II, donde subimos un par de kilómetros dirección norte, aquí decido acelerar un poco el ritmo para intentar bajar todo lo posible el crono, marcando parciales entre 5:30 y 5:45 min/km.

Poco a poco van cayendo  los kilómetros, pronto llego al número 15 con un parcial de 1:28:00. Tras un rápido calculo mental, puedo acabar con un crono de 2:05, o incluso menos. Decido apretar un poco mas el ritmo para compensar que los últimos casi dos kilómetros son en subida, donde parece probable que pierda un par de minutos.

Vuelvo a encontrarme con la animación de los compañeros Red Runners en el kilómetro 16, y luego cuando regreso sobre el 18.

A falta de 500 metros para meta. Tras 1,5 km de subida.
(Foto: Blogmaldito)
Pronto encaramos la Ronda Cervantes, donde intento mantener el ritmo al principo de la subida, y al final me conformo con poder seguir trotando. Giramos a la izquierda por la Ronda Alfons X, donde la subida nos da un pequeño respiro, pero pronto sigue subiendo hacia la Plaça Espanya y ya encaramos la recta final en el Cami de la Geganta, ya con un claro perfil favorable, pero voy ya sin fuerzas. Tan solo intento no quedarme sin fuerzas del todo.

Un giro de 180 grados a apenas 50 metros de meta me rompe el sprint final, pero ya tengo mi nueva MMP en el bolsillo: 2:06 cuatro minutos menos que en Granollers hace 10 meses y seis minutos menos que en Gava, hace apenas dos meses.

Recojo, exhausto, el agua y la isotónica que nos ofrece la organización, recojo también la bolsa del corredor, llena de productos de limpieza. Hemos recorrido 21 km con los dos finales muy exigentes y hecho de menos algo de alimento solido (fruta, frutos secos, etc) al cruzar la meta.

Tras estirar un poco mis maltrechas piernas, voy hacia el coche, felicitándome por mi suerte al aparcar tan cerca de la meta. Sobretodo teniendo en cuenta el peso de la bolsa del corredor...

Una buena carrera, sobretodo a nivel personal, aunque a nivel organizativo no ha brillado demasiado, haciéndose eco en las redes sociales de los fallos de la organización en la entrega de los dorsales y también de las quejas por el cambio del recorrido (y su estrechez en algunos puntos) con respecto a años anteriores.

Felicidades Tere por acabar tu primera Media Maratón.

En esta ocasión, por compromisos familiares, no hay bravas post-cursa :(

Ahora toca preparar la siguiente carrera.

Alguna fotos (Facebook Red Runners y Blogmaldito.com):



Tere con sus liebres